Hay momentos del viaje que son de paso, simplemente tramos que se tienen que transitar para ir del punto A al B y así sucesivamente. Pero en los viajes como en la vida no hay nada escrito. Estos días no tenía nada planeado con más interés social que el cabo de Skagen, archiconocida por el choque de mares entre el mar Báltico y el océano Atlántico y por la cantidad de pintores que han grabado en sus cuadros momentos de ese enorme cabo de arena. Pero los guionistas de esta historia, que es mi vida, han decidido que me merecía momentos emotivos, y momentos en que tendría que controlar mi mal genio y utilizar mi ingenio para conseguir objetivos. Nunca en mi vida me había pasado tanto tiempo mirando al mar… Continue Reading
